domingo, 1 de mayo de 2011

Metafóricamente

Un guerrero de la luz comparte su mundo con las personas a las que ama y procura estimularlas a cumplir lo que les gustaría hacer. En estos momentos, el adversario aparece con dos tablas en la mano. En una tabla está escrito: "Piensa más en tí mismo. Conserva las gracias recibidas para tí o acabarás perdiéndolo todo". En la otra tabla se lee: "¿Quién te crees que eres para ponerte a ayudar a los demás? ¿Es que no consigues ver tus propios defectos?
Un guerrero sabe que tiene defectos, pero también sabe que puede crecer sólo y distanciarse de sus compañeros. Entonces, aún creyendo que el adversario tiene parte de razón, él se olvida de las dos tablas y continúa repartiendo entusiasmo en su entorno. Se sienta con sus compañeros alrededor de la hoguera, todos comentan conquistas y los extraños que se unen al grupo son bienvenidos, porque todos se sienten orgullosos de sus vidas y del buen combate.
El guerro sabe lo importante que es compartir su experiencia con los demás y habla con entusiasmo sobre el camino, cuenta como resistió a cierto desafío, que solución encontró para un momento dificil. Cuando narra sus aventuras, reviste sus palabras de pasión y romanticismo. A veces se permite exagerar un poco, pues sabe que sus antepasados también exageraban de vez en cuando; pero cuando actúa de esta manera, jamás confunde orgullo con vanidad y evita creer en sus propias exageraciones.

Mi visión metafórica del "correr".

5 comentarios:

Santa Biología dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Santa Biología dijo...

Firmado....

Eduardo Coelho....:-)

A descansar un poco tío...."nunca cree en sus exageraciones"....me gusta.

Ánimo y al toro

Unknown dijo...

Muy fino. Ruedas¿?

Manuel Tintoré Maluquer dijo...

El caballero de la armadura oxidada está listo; suerte.

Saturnino dijo...

Me gusta esa visión.
Un saludo.